Normas de Centro


Las normas de conducta son de obligado cumplimiento para todo el alumnado de nuestro colegio, ya que responden a la necesidad de mantener un clima de trabajo adecuado a la tarea formativa. Dichas normas responderán a la necesidad de mantener, tanto dentro de las aulas como en el resto del recinto escolar, un clima adecuado a la tarea formativa propia del Colegio Liceo San Pablo.


Las normas de convivencia recogidas en el Plan de Convivencia son de carácter educativo y contribuyen a crear el adecuado clima de respeto, así como de responsabilidad y esfuerzo en el aprendizaje, necesarios para el funcionamiento de los centros docentes.

Desde el centro se corrigen los actos contrarios a las normas establecidas en las normas de convivencia que realizan los alumnos/as en el recinto escolar o durante la realización de actividades complementarias y extraescolares y servicios educativos complementarios. Igualmente, corregimos todos aquellos actos de alumnos/as realizados fuera del recinto escolar cuando tienen su origen o estén directamente relacionados con la actividad escolar o afecten a los miembros de la comunidad educativa.

Entre las normas establecidas hacemos especial hincapié en las siguientes:


Está prohibido el uso de teléfonos móviles y aparatos reproductores de música en el centro, salvo bajo propuesta pedagógica del profesorado, acotada en el tiempo y en el espacio. Cualquier otra circunstancia será objeto de sanción.

El uso de teléfonos móviles y otros dispositivos electrónicos no está permitido a los alumnos durante la jornada escolar, entendida como el espacio de tiempo que incluye el horario lectivo, tiempo de recreo y los períodos dedicados al desarrollo de las actividades complementarias y extraescolares, salvo que esté expresamente previsto en el proyecto educativo del centro con fines didácticos.


Los alumnos están obligados a restituir cualquier pertenencia ajena que hubieran sustraído y a reparar los daños que causen, individual o colectivamente, de forma intencionada o por negligencia grave, a las instalaciones, a los materiales del centro y a las pertenencias de otros miembros de la comunidad educativa, o, en su caso, deberán contribuir al coste económico de su reparación, coste que deberán asumir los padres, o tutores del alumnado menores de edad sobre los que ejerzan la patria potestad o la tutela.


Asimismo, cuando se incurra en conductas tipificadas como faltas de respeto, agresión física o moral a sus compañeros o demás miembros de la comunidad educativa, repararán el daño moral causado mediante la presentación de excusas y el reconocimiento de la responsabilidad en los actos, bien en público o bien en privado, según corresponda por la naturaleza de los hechos y de acuerdo con lo que determine el órgano competente para imponer la corrección.


Para la adecuada convivencia, el colegio Liceo San Pablo trabaja además “El Plan Director para la convivencia y mejora de la seguridad en los centros educativos y sus entornos”, el cual consiste en la intervención y actuación de la policía nacional que ofrecen charlas de prevención e identificación de conductas disruptivas relacionadas con los siguientes temas:

  • Acoso escolar y ciberacoso
  • Uso de las tecnologías de la información y la comunicación.
  • Bandas (grupos violentos juveniles, conductas incívicas y vandálicas)
  • Drogas (consumo de drogas, de alcohol y otras adicciones)